El continente americano está dividido en tres zonas: Norte, Sur y Centro; pero solamente se encuentra partida en dos, cuando nos referimos al deporte más popular del mundo: el fútbol. La confederación de Fútbol de América del Sur, también llamada Sudamérica, tiene su legítima representación a través de la CONMEBOL (Confederación Sudamericana de Fútbol), entidad que contiene a las potencias campeonas del mundo como Brasil, Argentina y Uruguay. Por su parte, América del Norte y Central se unifican para formar la CONCACAF (Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol), la cual desde 1963 tiene su “Copa de Oro”, aunque se denomina de esta manera desde el año 1991.

En los primeros años, las selecciones que hoy en día son las más débiles dominaban el juego: Costa Rica, Haití, Guatemala y Honduras son algunas de las ganadoras de la copa. Pero a medida que fue pasando el tiempo, las selecciones de América del Norte comenzaron a ejercer su poderío. Desde el año 1991 las selecciones de México y EE.UU. ganaron catorce (14) de las últimas quince (15) ediciones generando una hegemonía total. Esa hegemonía pudo haber sido quebrada por los Reggae Boyz, como llaman al seleccionado de fútbol de Jamaica, que en las últimas tres ediciones llegaron a puestos decisivos con dos finales y una semifinal. De hecho en el año 2017, estuvieron a dos minutos de lograr el tiempo extra, pero se volvieron a la isla con un más que meritorio segundo puesto. Estos excelentes resultados sin trofeos, se deben a dos aspectos bastante claros. La camada de jugadores de la selección de Jamaica fue muy buena y tuvo que enfrentar a selecciones con mejores jugadores, pero todo esto pudo haber sido muy distinto si se hubieran tomado otras decisiones a nivel legal y organizativas. En la sección ReggaeSoccer vamos a demostrarles lo que hubiera sido la mejor selección en la historia de la CONCACAF.

Todo pasa por los temas de nacionalización de los jugadores. Por ejemplo, la selección campeona del mundo en el Mundial de Fútbol de Sudáfrica 2010 que fue España, no solo dominó el torneo, sino que también logró dos Eurocopas (2008 y 2012), imponiendo su hegemonía durante un prolongado período de seis años, convirtiéndose así en la mejor selección del mundo, debido a su estilo de juego de pases asociados, posesión de balón y una camada de mediocampistas sin igual. Pero incluso pudo haber sido mejor aún, aunque sea difícil de imaginarlo. Entre los años 2003 y 2004 los españoles quedaron maravillados con un niño que jugaba en la cantera del Barcelona FC. Todos conocemos esa historia, la del astro argentino Lionel Messi. La federación española insistió para nacionalizar al mediocampista de origen rosarino, pero no pudieron torcer la decisión del pequeño Messi, quien prefirió vestir la camiseta albiceleste. De poder conseguirlo, sin dudas que la selección de fútbol de España hubiese ganado más mundiales y más copas europeas. Otro de los ejemplos es el delantero Gonzalo Higuaín que nació en Brest (Francia), pero que nunca estuvo en duda su participación para la selección Argentina. Como todos sabemos, los galos son los últimos campeones de la copa mundial de fútbol organizada por la FIFA en Rusia 2018. Con estos ejemplos queremos remarcar que ambos jugadores argentinos, tuvieron la posibilidad de representar a otra camiseta/nación, y quizás con ellos como parte de sus selecciones, salir campeones del mundo. Lo mismo sucede con la simpática selección de Jamaica, quienes a pesar de contar con una de las mejores generaciones de su historia (incluyendo los Reggae Boyz del año 1998), pudieron llegar a ser potencia futbolística dentro del continente y porque no de todo el hemisferio.

Wes Morgan, defensor del Leicester City, capitán y campeón de la Premier League de Inglaterra en el año 2016; León Bailey atacante del Bayer 04 Leverkusen de Alemania; Adrian Mariappa del Watford y Michael Héctor del Fulham, ambos jugando en Inglaterra, son los pilares de la selección jamaiquina. Jugadores que sobresalen en sus equipos, participando incluso en las mejores ligas de Europa, sumado a los jugadores nacionalizados ingleses o nacidos en en Reino Unido, pero con la ascendencia jamaiquina por parte de sus padres.

Un ejemplo claro es Raheem Sterling, sin dudas uno de los mejores delanteros de Europa, haciendo dupla de ataque con el argentino Sergio Kun Agüero. Nació en Kingston (Jamaica) el 8 de diciembre de 1994, a los seis años de edad, tuvo que mudarse de su peligrosa ciudad natal jamaicana llamada Maverley, a su actual madre patria Inglaterra, como sucede con muchos jugadores que se marchan a buscar un futuro mejor en España ó Italia. Su infancia allí tampoco fue fácil, vivía en la pobreza de un barrio muy humilde, pero sin lugar a dudas, lo mejor que tiene el fútbol, mejor aun que la belleza del juego mismo, es que puede sacar a los jóvenes de las calles. El fútbol es la única oportunidad real que tiene un pobre de volverse rico, de dejar atrás esos tiempos crueles de marginalidad. Raheen con sólo diez años tenía una habilidad totalmente desacorde a su edad. No solo sobresalía por marcar más goles, ser el más rápido, el más ágil, sino que también sabía cuando, como y donde pasar el balón en tiempo y forma, algo muy difícil de ver en niños de esa edad. Así fue que rápidamente le ofrecieron la nacionalidad y a los quince años fue comprado por el Liverpool a cambio de un millón de Libras esterlinas.

Kyle Walker lateral derecho del Manchester City, que hizo una gran carrera en el equipo del Tottenham, es nativo de Inglaterra. Nació el 28 de mayo de 1990. Unos años antes su padre Michael Walker llegaba desde Jamaica para probar suerte en tierras anglosajonas, es allí donde se enamoró de Tracey, una muchacha de la ciudad de Yorkshire, y de dicha relación nació Kyle. Pero no se puede hablar de Kyle Walker sin sumar a su gran amigo Danny Rose, lateral izquierdo cuyo presente futbolístico lo sitúa a préstamo en el Newcastle. No solo compartieron más de siete años en los Spurs, sino que también se criaron juntos en el mismo barrio, la misma escuela, los mismos clubes de fútbol, y por supuesto también coinciden en su ascendencia jamaiquina, ya que los padres de Danny también son de la isla del reggae.

La magia en el mediocampo está a cargo de Alex Oxlade-Chamberlain, el nacido en Portsmouth en agosto de 1993.  Proviene de una raza mixta, su madre es de piel blanca y oriunda de dicha ciudad (Wendy Oxlade), y su padre es de raza negra y oriundo de Jamaica (Mark Chamberlain). Otro jugador que pudo haber obtenido la nacionalidad de Jamaica y que se les escapa a los Reggae Boyz. Los casos siguen creciendo a pasos agigantados, la ascendencia jamaiquina en Inglaterra sigue sumando más integrantes: Ashley Young, Daniel Sturridge, Theo Walcott, Chris Smalling, Demarai Gray, Andre Gray y muchos casos más que podrían cambiar la historia del seleccionado jamaiquino y cortar con la hegemonía de los poderosos Estados Unidos y México en la región organizada a nivel fútbol por la CONCACAF.

Desde ReggaeSoccer te proponemos una tarea muy divertida para el hogar. Arma en tus juegos de PlayStation ya sea el FIFA o PES, un equipo con todos los jugadores nombrados y ponlos a competir contra las grandes potencias del fútbol mundial. Se van a sorprender de los resultados. En caso que te gusten los juegos de Modo Manager, te recomendamos crearte un usuario en el Soccer Manager, el mejor juego del estilo online que existe, y armar el once inicial con estos jugadores recomendados.

About Author

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *